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La FCC no aplicará la prohibición sobre los precios "exorbitantes" de las llamadas telefónicas en prisión.

La FCC pospondrá la implementación de los nuevos límites en las tarifas de llamadas telefónicas hasta 2027.

La Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) ha decidido suspender la aplicación de una normativa que tenía como objetivo reducir el costo de las llamadas telefónicas y videollamadas desde las prisiones. El lunes, Brendan Carr, presidente de la FCC designado por el expresidente Trump, informó que las instituciones penitenciarias no estarán obligadas a cumplir con las nuevas tarifas hasta el 1 de abril de 2027, lo que representa un cambio en los planes que preveían la implementación de estos límites en el presente año.

Desde hace tiempo, los familiares y amigos de personas encarceladas enfrentan tarifas que la FCC calificó como "exorbitantes" en 2024, por mantener el contacto a través de llamadas telefónicas o videoconferencias. Aunque algunos estados, como Connecticut, California, Minnesota y Massachusetts, han hecho que estas conversaciones sean gratuitas, la mayoría permite cobros que pueden alcanzar hasta 11.35 dólares por una llamada de 15 minutos, muchas veces incluyendo pagos adicionales para las cárceles y los gobiernos locales.

En 2023, el expresidente Joe Biden buscó abordar este problema al firmar la ley Martha Wright-Reed, la cual otorga a la FCC la facultad de regular las tarifas de las llamadas desde prisión y reducir los precios existentes. El año pasado, la FCC votó a favor de implementar las nuevas tarifas, prometiendo reducir el costo de una llamada de 15 minutos a solo 90 centavos en las prisiones más grandes, con la entrada en vigor de estas regulaciones planificada en un calendario escalonado comenzando el 1 de enero de 2025.

Sin embargo, el lunes la FCC anunció que retrasará la implementación de estas nuevas normativas por dos años más. Carr argumentó que los intentos de regular las tarifas de las llamadas desde prisión podrían conllevar "consecuencias negativas no deseadas", alegando que los límites propuestos podrían ser "demasiado bajos" para cubrir "medidas de seguridad requeridas" y que no daban a los estados el tiempo suficiente para encontrar otras fuentes de financiamiento. También insinuó que esta decisión de posponer las reglas busca garantizar que se mantengan "protocolos importantes de seguridad", lo que podría incluir la adopción de herramientas de seguridad pública con "inteligencia artificial avanzada y aprendizaje automático". Carr había votado parcialmente a favor de los límites de las tarifas en 2024.

La comisionada de la FCC, Anna Gomez, criticó duramente la decisión de Carr de pausar la implementación de la ley Martha Wright-Reed. En una declaración, expresó que “en lugar de hacer cumplir la ley, la Comisión está ahora retrasando, protegiendo un sistema roto que aumenta los costos y recompensa a las instituciones correccionales a expensas de los individuos encarcelados y sus seres queridos”. Gomez añadió que “es hora de que la FCC cumpla con su deber. Su responsabilidad no es proteger contratos orientados a las ganancias, sino mantener la ley y servir al público”.