Cover Image for Una nueva startup busca introducir computadoras cuánticas en los automóviles, alimentadas por diamantes y funcionando junto a las GPUs más rápidas.

Una nueva startup busca introducir computadoras cuánticas en los automóviles, alimentadas por diamantes y funcionando junto a las GPUs más rápidas.

Chips cuánticos que operan a temperatura ambiente y se pueden conectar a servidores convencionales.

Quantum Brilliance, una empresa con sede en Alemania y Australia, está emprendiendo un ambicioso proyecto para desarrollar computadoras cuánticas portátiles que utilizan unidades de procesamiento cuántico (QPUs) basadas en diamante. Estos dispositivos están diseñados para funcionar a temperatura ambiente y podrían integrarse con GPU y CPU de alta gama en servidores o vehículos, proporcionando una solución más eficiente y asequible para la inferencia de inteligencia artificial en comparación con el hardware convencional.

Durante los últimos años, la atención se ha centrado en la ingeniería de diamantes sintéticos de alta pureza para minimizar las interferencias de impurezas. Un notable avance en esta dirección fue una colaboración en 2022 entre una empresa japonesa de joyería y académicos, que resultó en un método para producir obleas de diamante ultra-puras de 2 pulgadas. En 2023, Amazon se unió a este esfuerzo mediante su Centro de Redes Cuánticas, colaborando con Element Six de De Beers para cultivar diamantes creados en laboratorios, destinados a sistemas de comunicación cuántica.

Quantum Brilliance pretende utilizar las vacantes de nitrógeno en diamantes para crear qubits, ofreciendo una alternativa más compacta y eficiente en energía en comparación con los sistemas cuánticos criogénicos. Andrew Dunn, director operativo de la empresa, manifestó que su enfoque no se centra en la creación de millones de qubits, que serían costosos y consumirían mucha energía. En cambio, están interesados en comprender cómo utilizar 100 qubits en aplicaciones prácticas, como procesamiento de datos dispersos y la inferencia de inteligencia artificial.

La compañía ya colabora con instituciones de investigación como el Instituto Fraunhofer de Física de Estados Sólidos Aplicada, que actualmente está evaluando la segunda generación de su kit de desarrollo cuántico, QB-QDK2.0, que integra procesadores clásicos con el QPU en un solo dispositivo. Asimismo, el Laboratorio Nacional Oak Ridge en EE. UU. ha adquirido tres sistemas para investigar la escalabilidad y el procesamiento paralelo en aplicaciones de modelado molecular.

Quantum Brilliance también colabora con imec para incorporar procesos de diamante en la fabricación estándar de chips. Más allá del ámbito computacional, la empresa vislumbra un gran potencial en el ámbito de los sensores cuánticos, con aplicaciones que podrían servir tanto para la defensa como para sensores industriales. El objetivo final es que la computación cuántica se convierta en una tecnología tan común como cualquier otro chip en un servidor. Como expresó Dunn, desea que la computación cuántica sea "realmente aburrida e invisible, simplemente otro chip haciendo su trabajo".