
¿Cansado de las buenas lentes de cámara? Estas únicas lentes 'Light Leak' son intencionalmente malas y, sí, son muy divertidas.
Deja de lado por un momento los costosos y óptimamente perfectos objetivos de focal fija...
Los fabricantes de lentes han desarrollado diversas opciones para quienes buscan alta calidad en sus cámaras mirrorless, ofreciendo una gran variedad de elecciones. Sin embargo, también hay momentos en los que es valioso optar por herramientas que aporten un carácter distintivo, especialmente para quienes se encuentran en un bloqueo creativo o simplemente desean experimentar con su equipo.
Recientemente, he estado utilizando la serie de Lentes Light Leak de PolarPro, una marca que es más conocida por sus filtros de alta calidad. Estos lentes, con características intencionadamente imperfectas, me han proporcionado un respiro al buscar esa perfección óptica que a veces resulta estéril. El secreto detrás del estilo único de los lentes Light Leak es su capacidad de "filtrar" luz en el sensor de la cámara, generando un destello al estilo analógico.
El funcionamiento de este efecto es controlable gracias a un manguito en el barril del lente que puede ser desplegado para permitir la fuga de luz hacia el sensor. Al girar el manguito se pueden lograr diferentes tipos de efectos de destello, y si no se desea provocar un escape de luz, simplemente se puede cerrar. La inspiración detrás de estos lentes proviene de los días de la fotografía analógica, donde una cámara defectuosa podía causar efectos sorprendentes al permitir la entrada de luz no deseada.
A diferencia de las cámaras analógicas, con los lentes PolarPro el efecto de luz filtrada se puede visualizar en tiempo real a través de la pantalla de la cámara. Solo con cambiar ligeramente el ángulo de la cámara o ajustar cuánto se despliega el manguito, se pueden obtener efectos que van desde sutiles difusiones de luz hasta halos pronunciados, convirtiendo la experiencia en un ejercicio de creatividad muy divertido.
La serie incluye tres lentes: 16mm f/11, 28mm f/11 y 50mm f/11, compatibles con los montajes más populares de cámaras mirrorless como Sony E, Canon RF, Nikon Z y Fujifilm X. El coste de cada lente en Estados Unidos es de $129.99, con la opción de adquirir un paquete de tres por $349.99. Aunque se pueden comprar individualmente en otros países, los precios pueden variar.
De los tres lentes, el 28mm ha sido mi favorito, ya que además del efecto de fuga de luz, presenta una disminución notable en la nitidez desde el centro hacia los bordes, lo que crea un efecto casi onírico. Esta combinación de efectos añade un carácter único a las imágenes, resaltando el sujeto central y produciendo resultados artísticamente imperfectos.
Aunque es posible replicar este efecto mediante edición digital, el encanto de los lentes Light Leak radica en que estos efectos son parte de la imagen original, lo que les otorga autenticidad frente a la luz ambiental.
A pesar de que las Lentes Light Leak suelen parecer una opción pasajera y de poco valor, he descubierto que ofrecen diversión a largo plazo. Son ópticamente imperfectas, pero su calidad de construcción es sobresaliente, ya que cada lente está fabricada completamente en metal. No obstante, carecen de contactos electrónicos, lo que significa que no se registra información de metadata y se requiere que la cámara esté configurada para disparar sin lente.
Al utilizar estos lentes con mi Nikon Z6 II, he encontrado algunas limitaciones prácticas, como el agarre de la cámara que restringe el efecto de fuga de luz y la distancia mínima de enfoque del 28mm, que impide tomar primeros planos adecuados. A pesar de estos inconvenientes, los Lentes Light Leak de PolarPro son una opción divertida y, considerando su precio de alrededor de $100, pueden ser considerados como una compra impulsiva. Técnicamente no son perfectos, pero seguro que su uso resulta en momentos agradables y creativos.