
Este sorprendente teclado mecánico cuenta con una pantalla de 10 pulgadas, iluminación RGB y parece completamente innecesario.
Con un peso de 1.5 kg, el teclado no se considera especialmente portátil.
Thanko ha presentado un producto sorprendente en el cada vez más especializado ámbito de los periféricos: un teclado mecánico que integra un monitor táctil de 10 pulgadas. Este teclado está dirigido a los usuarios que priorizan el espacio, pero que aún desean contar con una experiencia de escritura táctil y una pantalla adicional.
El teclado está diseñado con un enfoque en la eficiencia del trabajo, combinando un teclado mecánico personalizable y duradero con un monitor independiente. A pesar de su compacta dimensión de 320 x 140 mm, que permite que se pliegue cuando no se utiliza, cuenta con una pantalla que ofrece una resolución de 1,920 x 720 en un formato TFT LCD. La pantalla admite un total de 10 puntos de toque y puede ajustarse en ángulo, lo que resulta atractivo para programadores o usuarios de negocios que necesiten una segunda pantalla, aunque la baja resolución y el formato de aspecto podrían limitar la utilidad del contenido que se puede mostrar.
El monitor puede ser utilizado como una pantalla táctil principal, pero Thanko indica sutilmente que si presenta problemas de funcionamiento, esto podría deberse a una incompatibilidad. La falta de soporte para macOS o Linux también sugiere que este dispositivo está hecho principalmente para el ecosistema de Windows, dejando en la incertidumbre su funcionalidad en otros entornos.
A pesar de su potencial para ser un sólido teclado empresarial, su rango de compatibilidad es limitado. Equipado con interruptores azules por defecto, el teclado permite la personalización de tipos de interruptores y keycaps. Además, cuenta con retroiluminación RGB y se entrega con un cable USB 3.2 Gen 1, con la opción de suplementar energía a través de un puerto USB Type-C.
Aun así, queda la duda sobre si la experiencia de escritura realmente es de alta calidad o si se queda en un nivel aceptable con algunos detalles estéticos, dado que no se han compartido especificaciones sobre la latencia al escribir o el accionar de los interruptores. Con un peso aproximado de 1.5 kg y un precio de 69,800 yenes (cerca de $445), si bien la economía de espacio es un punto a favor, los compradores podrían cuestionarse la conveniencia de este costo en comparación con la adquisición de un teclado mecánico independiente junto a un monitor secundario.