
Los polos del sol se han invertido. Una sonda espacial está observando lo que sucederá a continuación.
El Solar Orbiter ha capturado la primera imagen de la región del polo sur del sol.
La misión Solar Orbiter ha logrado obtener la primera imagen de la región del polo sur del sol. Este logro se adelantó a lo esperado, proporcionando una vista sin precedentes de nuestra estrella en luz ultravioleta. La nave espacial, un esfuerzo conjunto entre la NASA y la Agencia Espacial Europea, capturó imágenes detalladas en marzo, siendo la primera en hacerlo desde una proximidad cercana a esta zona del sol.
En la actualidad, el sol atraviesa un período de gran agitación, alcanzando el caos máximo de su ciclo solar, algo que ocurre regularmente cada 11 años, similar a las temporadas de tormentas en la Tierra. Durante los extremos de este ciclo, la actividad solar se calma, pero antes de ello, aumenta, culminando en erupciones masivas. A medida que el Solar Orbiter observó esta actividad, se notó un fenómeno notable: los polos del sol han invertido su posición. Mientras que un imán convencional presenta polos claramente definidos, ambos polos solares se encuentran actualmente en la parte inferior. Este intercambio es temporal y solo se da durante el "máximo solar", hasta que una única polaridad tome el control y el campo magnético se reorganice.
El líder de uno de los equipos de instrumentos del Solar Orbiter, Sami Solanki del Instituto Max Planck de Investigación del Sistema Solar, mencionó que la dinámica de esta acumulación de energía aún no se comprende completamente. El orbiter, lanzado en 2020, utilizó un asistencia gravitacional de Venus en febrero, lo que le permitió salir del plano ecuatorial solar y obtener un ángulo de visión único.
A diferencia de la misión Ulysses, que anteriormente sobrevoló los polos solares pero no capturó imágenes, el Solar Orbiter está equipado con diversas herramientas. Estas incluyen cámaras que filman en luz óptica y ultravioleta, junto con instrumentos que mapean el campo magnético y analizan la luz de diferentes temperaturas de gas ionizado sobre la superficie solar.
Aunque el fundamento del ciclo solar sigue siendo incierto, se cree que la clave para desvelar sus misterios reside en los polos solares. Uno de los objetivos principales de la misión es avanzar en este conocimiento, lo que podría mejorar las predicciones sobre eventos meteorológicos espaciales que pueden afectar a redes eléctricas, satélites y sistemas de navegación.
Las imágenes tomadas en marzo muestran al sol desde un ángulo de 17 grados debajo del ecuador solar. En los próximos años, el satélite cambiará su inclinación, alcanzando 23 grados en diciembre de 2026, y posiblemente hasta 33 grados para mapear completamente ambos polos en 2029.