
Se autoriza el regreso al vuelo de Starship de SpaceX con áreas de riesgo ampliadas.
La Administración Federal de Aviación ha autorizado a SpaceX a llevar a cabo la novena prueba de vuelo de su sistema de cohete Starship, después de una serie de explosiones consecutivas.
La Administración Federal de Aviación (FAA) ha autorizado a SpaceX a llevar a cabo el noveno vuelo de prueba de su sistema de cohetes Starship, después de las explosiones que ocurrieron a principios de este año. En un anuncio realizado el jueves, la FAA mencionó que está "ampliando el tamaño de las áreas de peligro tanto en los EE. UU. como en otros países" para este vuelo, basándose en un análisis de seguridad actualizado proporcionado por SpaceX.
Los problemas con el vehículo Starship en los vuelos 7 y 8 aumentaron la probabilidad de fallos, lo que lleva a la creación de un área de peligro más extensa. Estas áreas se definen como zonas temporales sin vuelo que establece la FAA cuando hay un riesgo de colisión con escombros. La nueva área de peligro determinada por la FAA abarca alrededor de 1,600 millas náuticas que se extienden hacia el este desde Texas y pasan por las Bahamas y Turks y Caicos, donde habían caído los restos de las pruebas anteriores. Esta dimensión es aproximadamente el doble del área de peligro que se utilizó para la última prueba de Starship en marzo.
Además, la FAA ha estipulado que SpaceX debe realizar el vuelo de prueba en períodos de viaje "no pico", ya que los incidentes anteriores obligaron a la agencia a redirigir numerosos vuelos nacionales e internacionales. SpaceX ha estado probando su sistema Starship desde hace dos años en el complejo de lanzamiento que la empresa construyó en el sur de Texas. Según su CEO, Elon Musk, el objetivo último del sistema es enviar personas a Marte, mientras que en el corto plazo busca aumentar la capacidad de lanzamiento de sus satélites Starlink en órbita terrestre.
SpaceX también ha mencionado que planea usar Starship "para proporcionar una mayor capacidad de misión a la NASA y al Departamento de Defensa". Hasta la fecha, la compañía ha utilizado su cohete Falcon 9 como principal herramienta para lanzar los satélites Starlink, y actualmente, la mayoría de los lanzamientos de Falcon 9 son para este servicio. A pesar de que Starlink ya se ha establecido como un proveedor de internet muy solicitado, existe la posibilidad de que la necesidad de capacidad de lanzamiento aumente, especialmente con la administración de Trump impulsando a otros países a adoptar este servicio en el marco de sus guerras comerciales.
Informes indican que miembros del Departamento de Eficiencia Gubernamental de Musk están colaborando con la FAA para probar terminales Starlink como una posible solución a los problemas del actual sistema de control de tráfico aéreo.