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El FBI advierte sobre la aparición de funcionarios gubernamentales falsos creados con IA y deepfake.

El FBI está alertando sobre ataques continuos de smishing y vishing.

El FBI ha emitido una alerta sobre una serie de ataques en curso en los que los delincuentes están suplantando a altos funcionarios de Estados Unidos, tanto a nivel federal como estatal. En muchos de estos casos, los atacantes están enviando mensajes de voz clonados, lo que destaca la sofisticación de las técnicas utilizadas, que incluyen tecnologías avanzadas como deepfake y la inteligencia artificial generativa (GenAI).

Esta advertencia fue compartida en una declaración pública el 15 de mayo, en la que se indica que los actores de la amenaza están creando mensajes de texto y audio que parecen creíbles, haciéndose pasar por funcionarios actuales y antiguos del gobierno de Estados Unidos y sus contactos. El FBI aconseja a los ciudadanos no asumir la autenticidad de ningún mensaje que afirme provenir de un funcionario de alto rango.

El smishing, que es phishing a través de SMS, y el vishing, que se refiere a phishing por voz, son variantes del ataque de phishing tradicional, donde los delincuentes busca captar datos sensibles de las víctimas. Los estafadores a menudo prometen descuentos significativos en productos populares o amenazan con cerrar cuentas de redes sociales, lo que lleva a las personas a compartir información valiosa como contraseñas o datos de tarjetas de crédito sin pensarlo dos veces.

El FBI no ofreció detalles específicos sobre el contenido de los mensajes enviados, pero aclaró que los atacantes intentan trasladar a las víctimas a plataformas de mensajería secundarias, donde distribuir malware podría resultar más sencillo. También se sugirió a los ciudadanos verificar la identidad de quienes envían mensajes y prestar atención a las inconsistencias en el tono y la elección de palabras en los mensajes de voz.

A pesar de que el phishing existe desde los inicios de Internet, el auge de la inteligencia artificial generativa y los deepfakes han agravado la situación. Un caso notorio es el de Elon Musk, cuya imagen es frecuentemente utilizada en anuncios de intercambios de criptomonedas y sorteos fraudulentos.