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El creador de LibreOffice invita a los usuarios de Windows 10 a hacer el cambio en una campaña viral titulada 'Opta por Linux, no por Windows 11'.

Se está recomendando nuevamente a los usuarios de Windows 10 que consideren cambiarse a Linux.

La Document Foundation, responsable del desarrollo de LibreOffice, ha expresado su posición contraria a Windows 11, instando a los usuarios de Windows 10 a considerar la migración a Linux. Esta organización está impulsando una campaña que destaca las ventajas de Linux, como su naturaleza gratuita, abierta y transparente. Observan que muchos usuarios podrían verse forzados a cambiar a Windows 11 debido al fin del soporte para Windows 10 previsto para octubre de 2025, pero advierten que existe una alternativa más favorable.

En un reciente post en su blog, la Document Foundation plantea que "el tiempo para considerar Linux y LibreOffice está llegando", enfatizando que la transición a Linux brindaría a las personas y organizaciones mayor control sobre su software y datos. La organización considera que continuar usando Windows 11 puede llevar a una dependencia excesiva de los servicios de Microsoft, así como a un mayor control sobre las operaciones de los usuarios, despliegue de publicidad e integración forzada con servicios en la nube como OneDrive.

Se argumenta que los nuevos requerimientos de hardware de Windows 11 pueden dejar obsoletos muchos dispositivos que, aunque operativos en Windows 10, no cumplen con estos nuevos estándares. Esto se convierte en un enfoque clave, ya que no solo se limita a un argumento sobre preferencias de software, sino también sobre la viabilidad continua de hardware.

Además, la Document Foundation sostiene que tanto Linux como LibreOffice ofrecen alternativas viables y seguras al ecosistema de Windows y Microsoft 365. La entidad recalca que el cambio a Linux no es tan complicado como se podría pensar, incluso a nivel corporativo. Sugieren que se empiece a experimentar con Linux y LibreOffice en una segunda partición del PC o en departamentos menos críticos dentro de una empresa.

Sin embargo, la transición puede ser un desafío notable, especialmente para aquellos usuarios menos técnicos que podrían enfrentar dificultades al adaptarse a una interfaz completamente diferente y encontrar que algunas aplicaciones adquiridas no son compatibles con Linux. Aunque la comunidad de Linux es generalmente muy solidaria, la dificultad del cambio puede ser subestimada por aquellos que han estado cómodos en su entorno de Windows.

En conclusión, aunque la propuesta de la Document Foundation de pasarse a Linux puede ofrecer beneficios atractivos de transparencia y libertad frente a las prácticas comerciales de Microsoft, la realidad de la migración puede ser un obstáculo significativo para muchos usuarios de Windows 10.