
Los vendedores en línea pierden miles de millones debido a devoluciones de cargos fraudulentas en 2025.
Algunas empresas se declaran en quiebra al intentar combatir el fraude en reembolsos.
Las chargebacks fraudulentas se están convirtiendo en una carga financiera y operativa importante para las empresas a nivel global, según un nuevo informe. Un estudio patrocinado por Mastercard, realizado por Datos Insights, estima que los vendedores perderán hasta $15 mil millones debido a chargebacks fraudulentos en 2025. Se espera que el volumen total de chargebacks alcance los $33.79 mil millones este año y aumente a $41.69 mil millones para 2028. Estas disputas fraudulentas tienen implicaciones amplias que afectan tanto a comerciantes como a consumidores.
El crecimiento en el comercio digital, aunque ha facilitado las compras por internet, también ha aumentado su vulnerabilidad. Con más compras realizadas a través de plataformas de comercio electrónico, también crecen los reclamos de chargebacks. Curiosamente, un 45% de estos cargos provienen de reclamos de "primera parte", donde clientes legítimos niegan fraudulentamente transacciones. Esta situación es facilitada por la facilidad con la que actores maliciosos pueden impugnar cargos a través de aplicaciones bancarias, incluso sin pruebas sólidas.
Mastercard advierte que, en ausencia de medidas efectivas, se anticipa que habrá 324 millones de chargebacks para 2028, un aumento desde los 261 millones proyectados para 2025. Sin embargo, un sistema que debería proteger a los consumidores está siendo abusado. Los chargebacks no solo representan un inconveniente financiero para las empresas en línea, sino que el valor promedio de un chargeback por disputa en ciertos sectores supera los $120.
Las pequeñas y medianas empresas (PYMES) son especialmente vulnerables a estos costos. Para ahorrar tiempo, muchos comerciantes optan por desechar reclamaciones de bajo valor, pero estas pérdidas pueden acumularse rápidamente. Se enfrentan a la difícil decisión de asumir los costos o invertir considerablemente en ciberseguridad y procedimientos de resolución de disputas. Cualquiera de las dos opciones implica un gasto adicional, lo que podría resultar en precios más altos o consecuencias aún peores.
Los datos de Mastercard revelan que el 46% de las PYMES ha sufrido un ciberataque, con pérdidas severas: el 18% ha solicitado quiebra y el 17% ha cerrado sus puertas. La ciberseguridad se considera esencial, con un 62% de las PYMES priorizando su presupuesto en este aspecto, y alrededor del 80% la declara crítica para las operaciones diarias.
La solución propuesta incluye herramientas avanzadas de inteligencia artificial. Alertas automatizadas, etiquetado claro de transacciones y recibos digitales detallados permiten una gestión más inteligente de las disputas. Mastercard señala que las empresas que utilizan estas herramientas logran ganar más de la mitad de sus casos de representación, donde impugnan chargebacks con evidencia.
Es crucial que los comerciantes trabajen junto a los mejores proveedores de servicios y gateways de pago para mitigar esta amenaza, ya que, sin intervención, los costos inevitablemente se trasladarán a los consumidores a través de precios más altos y un servicio más lento.