El CEO de Nvidia, Jensen Huang, advierte que habrá pérdidas de empleos debido a la inteligencia artificial.
Huang sostiene que el entorno laboral requiere nuevas aspiraciones.
Jensen Huang, director ejecutivo de Nvidia, ha abordado el tema de la posible pérdida de empleo como consecuencia del avance de la inteligencia artificial (IA), pronunciándose sobre la inevitabilidad de estos cambios. En una reciente entrevista, Huang trasladó la responsabilidad de la protección laboral a los líderes empresariales, mencionando que la falta de nuevas ideas podría llevar a que los aumentos en productividad resulten en la eliminación de puestos de trabajo. “Todos los empleos se verán afectados. Algunos se perderán, mientras que muchos otros serán creados. Espero que los beneficios en productividad que estamos viendo en todas las industrias eleven a la sociedad”, declaró.
La influencia de Huang en el ámbito de la IA es considerable, dado que Nvidia es un actor clave en el mercado de los semiconductores y la IA. Sus unidades de procesamiento gráfico (GPUs) son fundamentales para el desarrollo de la inteligencia artificial a nivel global, incluso en China, lo que ha generado inquietud en algunos sectores políticos de Estados Unidos.
Recientemente, Huang recibió una advertencia por parte de los senadores Jim Banks y Elizabeth Warren, quienes expresaron su preocupación por una posible reunión con empresas chinas. Ellos argumentaron que esto podría legitimar colaboraciones con el ejército chino o revelar vulnerabilidades en los controles de exportación de EE. UU.
Un portavoz de Nvidia comentó que la tecnología estadounidense establecerá el estándar global y que “América gana”, subrayando que, dado que China es uno de los mayores mercados de software en el mundo, el software de IA debería funcionar mejor en la infraestructura tecnológica estadounidense, lo que incentivaría a otras naciones a optar por soluciones americanas.
Por otro lado, Huang ha señalado que las ramas militares de China tienden a evitar el uso de tecnología estadounidense debido a los riesgos asociados; opinando que, en este contexto, no pueden depender de ella. A pesar de los estrictos controles que han limitado el acceso de China a tecnologías avanzadas de IA, persiste la inquietud sobre la seguridad nacional de EE. UU. si estas empresas chinas llegan a utilizar tecnología estadounidense para potenciar sus capacidades.
