
Probé una lente de punta de dedo que prometía un zoom de 1200x para mi iPhone, pero no reemplazará a mi microscopio por el momento.
El iMicro Q3p es un microscopio compacto, pero presenta una advertencia importante.
No es necesario ser un científico para disfrutar del fascinante mundo de la microscopía. Cualquier objeto, desde una alfombrilla, la punta de un bolígrafo o incluso una pestaña rebelde, puede resultar increíble cuando se observa a través de un microscopio, revelando un universo diferente al que estamos acostumbrados. Sin embargo, para ver esos detalles diminutos, generalmente se necesita un gran aparato. Los microscopios de calidad suelen ocupar mucho espacio en el escritorio y requieren una inversión considerable.
El iMicro Q3p cambia esta perspectiva al ofrecer una experiencia de microscopía portátil. Este dispositivo, casi del tamaño de una lente de contacto, se adosa a la cámara de cualquier smartphone y promete convertirlo en un microscopio de hasta 1200x por un precio accesible de aproximadamente CA$59 (unos $43 / £32 / AU$67). Esta audaz afirmación ha captado la atención de miles de interesados, así que decidí probar el Q3p por mí mismo.
Sin embargo, usando el iMicro se necesita una técnica cuidadosa para obtener resultados significativos. La instalación es bastante delicada debido a su diseño compacto y la necesidad de un enfoque preciso para conseguir imágenes claras. Aunque al principio esta búsqueda de la posición óptima resulta entretenida, puede volverse tediosa, especialmente al cambiar de muestras. Para abordar este desafío, el Q3p incluye un soporte de enfoque que, aunque ayuda, no logra proporcionar la precisión deseada.
El Q3p ha evolucionado desde sus predecesores, con mejoras en el zoom y la óptica. Este mini microscopio se adhiere al teléfono mediante una capa con pequeñas ventosas y es reutilizable, lo que permite compartirlo sin dejar residuos. A pesar de esto, al utilizarlo requiere control manual y la sujeción precisa del teléfono para capturar imágenes claras.
Durante mis pruebas, utilicé el Q3p para examinar materiales como hilos y cabellos. Las imágenes capturadas revelan detalles ocultos, gracias a la capacidad de polarización del dispositivo, que mejora la definición de colores y contrastes. Sin embargo, el reclamo de una magnificación de 1200x ha generado dudas. Importantes matices indican que solo una parte de este aumento proviene de las ópticas del lente; el resto incluye factores como la escala de imagen y el zoom digital, resultando en un aumento óptico cercano a 390x.
A pesar de esta discrepancia, la calidad de las imágenes es impresionante para un dispositivo tan pequeño, aunque se debe tener en cuenta que este no es un sustituto de un microscopio profesional. Promocionarlo más como un juguete óptico podría ser más adecuado. Con esto en mente, el iMicro Q3p ofrece diversión y exploración por un precio razonable. A pesar de algunas limitaciones, la ingeniosidad detrás del Q3p genera un asombroso momento de descubrimiento al observar el mundo de cerca.