
Doji consigue 14 millones de dólares para hacer más divertida la prueba virtual de ropa con avatares de IA.
Durante años, grandes empresas tecnológicas como Amazon y Google han estado trabajando para que las pruebas virtuales sean más atractivas, con el objetivo de incentivar a los consumidores a realizar más compras por internet.
Grandes empresas tecnológicas como Amazon y Google han estado buscando formas de hacer que las pruebas virtuales de ropa sean más atractivas para motivar a los consumidores a realizar compras en línea. Además, varias startups han intentado utilizar inteligencia artificial para resolver problemas relacionados con la inspiración y el ajuste en la moda. En este contexto, surge Doji, una nueva startup que presenta una aplicación destinada a hacer las pruebas de ropa más divertidas y sociales. Esta aplicación permite a los usuarios crear avatares y explorar diferentes estilos que podrían inspirarles a comprar nuevas prendas. Los primeros usuarios han mostrado una recepción positiva hacia la aplicación.
Días después de su lanzamiento en la App Store, Doji ha conseguido asegurar una ronda de financiamiento inicial de 14 millones de dólares, encabezada por Thrive Capital con la participación de Seven Seven Six Ventures. Los recursos obtenidos se destinarán a mejorar los modelos de inteligencia artificial de la empresa. La existencia de una aplicación como Doji es posible gracias a los recientes avances en tecnología de IA, que la compañía utiliza para desarrollar avatares personalizados y lograr que las pruebas de ropa sean más realistas.
Fundada el año pasado por Dorian Dargan y Jim Winkens, el nombre Doji proviene de la fusión de sus nombres. Dargan trabajó anteriormente en Apple en proyectos relacionados con VisionOS y estuvo en Meta enfocándose en juegos para Oculus Quest. Winkens, por su parte, fue investigador en DeepMind y contribuyó al desarrollo de un producto de consumo basado en IA en Google. Ambos se conocieron a través de Twitter en 2022 y, al descubrir su interés compartido por la moda, comenzaron a colaborar en distintos proyectos. La chispa de inspiración llegó tras el lanzamiento de la controvertida aplicación de creación de avatares Lensa, que mostró a Dargan el profundo apego que las personas tienen con sus avatares.
Miles Grimshaw, socio de Thrive Capital, ha manifestado que la aplicación de Doji lo cautivó desde su primer uso. Destaca que los modelos de difusión ofrecen la posibilidad de crear un “espejo virtual” para probarse ropa y hacen que el acto de comprar sea más ameno, colocando al usuario en el centro de la experiencia.
La app, que actualmente se encuentra en modo de invitación, orienta a los usuarios a través de un proceso que incluye tomar seis selfies y subir dos imágenes de cuerpo completo para la creación del avatar. Este procedimiento toma alrededor de 30 minutos y se notifica al usuario cuando el avatar está listo. Durante el proceso de configuración inicial, los usuarios pueden seleccionar sus marcas favoritas para explorar más opciones en la aplicación. A diferencia de otras aplicaciones que han intentado ofrecer inspiración de compra mediante una única imagen, Doji optó por un enfoque más detallado para crear avatares de mayor calidad y emparejar mejor a los usuarios con las prendas adecuadas.
La aplicación permite a los usuarios explorar diferentes looks con su avatar y ajustar la combinación de prendas. Aunque actualmente la app no puede indicar cómo le quedaría un artículo a un usuario en términos de ajuste, esto es un área que el equipo planea abordar en el futuro. También se trabaja en la agilización del proceso de prueba virtual e integración de la compra directamente en la app, en lugar de redirigir a los usuarios a sitios externos. Doji, disponible en más de 80 países, aún no ha definido una fecha para eliminar el sistema de invitaciones.
Dargan considera que la propuesta de Doji se distingue de otras aplicaciones de prueba de ropa al ofrecer una forma entretenida de explorar prendas, así como una representación humana más precisa, gracias a su experiencia en diseño de avatares. "Creemos que quienes han explorado esta idea anteriormente no contaban con la tecnología o el gusto necesario para captar lo que realmente hace que una persona se sienta bien con una imagen de sí misma", afirmó Dargan.