
Conductores distraídos envían mensajes, leen y crean contenido en redes sociales, según encuesta.
Los conductores que envían mensajes, navegan y ven redes sociales mientras manejan están engañándose a sí mismos.
En las carreteras de Estados Unidos, es común observar a conductores que se distraen con sus teléfonos móviles mientras están al volante. Esta tendencia, que puede parecer inofensiva, representa un riesgo significativo, ya que los teléfonos están diseñados para captar nuestra atención. Además, las alertas del automóvil sobre llamadas y mensajes pendientes añaden más distracción al acto de conducir.
Un reciente estudio realizado por Life360, un servicio que monitoriza el comportamiento de los conductores, revela que el uso del teléfono mientras se conduce no es exclusivo de los jóvenes. Los datos muestran que más de un tercio de los conductores encuestados envían mensajes de texto, un 19% navega por redes sociales y un 16% ve videos en línea, siendo los conductores de la Generación Z los más propensos a estas conductas.
La encuesta, que incluyó a mil conductores entre 16 y 65 años, muestra que el 13% de los conductores de la Generación Z confiesa ver videos con frecuencia mientras conduce, en contraste con solo el 4% de los participantes generales. Similarmente, el 16.5% de los jóvenes admite enviar mensajes de texto de manera habitual, frente al 7.5% del resto de los encuestados. Aunque los conductores mayores también participan en estas conductas, lo hacen con menor frecuencia.
Además, el análisis de Life360 sobre las conductas de 55 millones de usuarios revela patrones preocupantes de conducción agresiva, parcialmente influenciados por distracciones. Los datos indican que los conductores de la Generación Z tienden a exceder los límites de velocidad con una frecuencia 84% mayor que los Baby Boomers.
La administración de seguridad de carreteras reportó más de 3,200 muertes en 2023 relacionadas con conductores distraídos. Según el Dr. Paul Atchley, profesor de psicología que investiga la conducción distraída, el acto de conducir ya sobrecarga la capacidad cognitiva del cerebro. Intenta que tu cerebro realice múltiples tareas simultáneamente y, inevitablemente, ocurren compromisos que afectan la percepción y la reacción a situaciones en la carretera.
Atchley explica que los conductores suelen creer que pueden manejar varias tareas debido a una percepción errónea de su capacidad de observación. Cuando un conductor distraído considera que no ocurrió un accidente, puede reforzar la idea de que su conducción fue impecable, aunque los datos sugieren lo contrario. Investigaciones muestran que incluso el uso de asistentes de voz mientras se conduce puede desviar la atención lo suficiente como para tardar hasta 27 segundos en recuperar la concentración total.
El Dr. Atchley recomienda a los conductores que limiten el acceso a sus dispositivos conectados, sugiriendo que apaguen el teléfono o lo coloquen fuera de su alcance mientras conducen. Advierte que cualquier actividad que Tome más de dos segundos en un dispositivo, como interactuar con un sistema de infoentretenimiento, representa un riesgo de seguridad.