Guía básica para salvaguardar tus datos frente a hackers y empresas.
Ciberatacantes, extracción de datos a través de inteligencia artificial y vigilancia gubernamental. Puede resultar abrumador pensar en cómo comenzar a proteger tu privacidad en línea. Aquí tienes una guía sencilla para ti y para aquellos que afirman no tener nada que ocultar.
Con el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca y el aumento del poder de la maquinaria de vigilancia digital del gobierno de EE. UU., la privacidad digital se ha convertido en un tema crucial. Sin embargo, navegar en el mundo de la seguridad digital puede resultar confuso, y surgen preguntas sobre la importancia de la privacidad digital para los ciudadanos comunes. Alguien podría cuestionar: ¿por qué debería preocuparme por mi privacidad si no tengo nada que ocultar?
En una reciente sesión de preguntas y respuestas en Reddit, Matt Burgess, escritor senior y experto en seguridad, ofreció varios consejos sobre cómo asegurar nuestra huella digital. A continuación se presentan algunas de sus recomendaciones.
Una de las primeras medidas que cualquiera puede adoptar para mejorar su seguridad digital es activar la autenticación multifactor en tantas cuentas en línea como sea posible. Este método implica que, además de la contraseña, se requiere otro paso de verificación (como un código de un sistema de autenticación), lo cual dificulta significativamente el acceso no autorizado.
Para aquellos que buscan hacer cambios rápidos y efectivos, se aconseja utilizar navegadores y motores de búsqueda que prioricen la privacidad, así como un gestor de contraseñas, siendo preferible tener contraseñas únicas para cada servicio.
Es común sentirse abrumado por la cantidad de consejos sobre privacidad, por lo que es esencial priorizar. Si se está comenzando en este camino, una buena opción sería:
- Cambiar a un navegador enfocado en la privacidad.
- Usar un motor de búsqueda que no recopile datos, como DuckDuckGo.
- Optar por aplicaciones y servicios que limiten la recolección de datos, como la aplicación de mensajería Signal.
Respecto a las VPN, una recomendación válida es Proton VPN, con sede en Suiza. Ofrece una versión gratuita que permite acceder a todas las funciones del plan regular, aunque con limitaciones en cuanto a dispositivos y ubicaciones de servidor.
La cuestión de manejar múltiples cuentas puede ser complicada, y utilizar una nueva dirección de correo electrónico para cada servicio resulta una tarea ardua. En su lugar, se sugiere tener un correo electrónico principal para las cuentas más importantes y otro para registrarse en servicios menos relevantes. También hay servicios que permiten crear correos temporales o "burners".
Cuando se trata de cruzar la frontera de EE. UU. y mantener la privacidad digital, las estrategias dependen del nivel de riesgo individual. Es crucial considerar qué información se tiene en el teléfono, incluyendo mensajes y aplicaciones sensibles. Se recomienda desinstalar aplicaciones que contengan datos confidenciales o incluso utilizar un teléfono de viaje, que no esté vinculado a información sensible.
En cuanto a los dispositivos inteligentes como Alexa, que están continuamente escuchando, se invita a considerar las implicaciones de privacidad que conllevan. Se aconseja informarse sobre las configuraciones de privacidad de cada dispositivo antes de su uso.
La recopilación de datos por parte de las empresas de inteligencia artificial representa una preocupación creciente, ya que muchos usuarios no son plenamente conscientes de cuánto están compartiendo. Se recomienda no ingresar información personal sensible al interactuar con herramientas de IA.
Por último, sobre los servicios de eliminación de datos personales, su utilidad puede variar según el país. En regiones con regulaciones de privacidad más robustas, como Europa, estos servicios pueden ser menos efectivos. Sin embargo, en EE. UU., donde las leyes de privacidad son más laxas, estos servicios podrían ofrecer cierto valor.
En resumen, la privacidad no se trata solo de ocultar información, sino de preservar el derecho a una vida sin vigilancia constante. Cada individuo debe tener la libertad de actuar sin que sus acciones sean monitoreadas por otros.
