Los usuarios siguen disfrutando de Fitbit, por lo que espero que se lance un nuevo rastreador de actividad con la llegada del Pixel Watch 4 el próximo mes.
Es momento de considerar el Luxe 2, el Charge 7 o el Inspire 4.
El evento Made by Google 2025 está a menos de un mes de celebrarse, donde se presentarán las últimas innovaciones en hardware de la compañía, incluyendo destacados modelos de teléfonos Pixel y relojes Android. Aunque la llegada del Google Pixel Watch 4 es esperada y parece inevitable, se espera también la introducción de un dispositivo más pequeño y económico.
La comunidad está ansiosa por ver un nuevo rastreador de actividad de estilo Fitbit que se asemeje a las bandas tradicionales. Los Fitbits han sido sinónimo de este formato durante años, y muchos usuarios aún disfrutan de modelos más antiguos, como el Fitbit Flex y el Inspire 2. La semana pasada, la aplicación de Fitbit experimentó problemas que provocaron dificultades para iniciar sesión y sincronizar, lo que provocó una ola de frustración entre los usuarios y reafirmó su apego a estos dispositivos.
Los Fitbits son aparatos tecnológicos asequibles y confiables, a menudo más cómodos que los relojes inteligentes debido a sus diseños delgados y con una duración de batería que puede extenderse a una semana, gracias a su bajo consumo de energía y a la reducción de funciones de comunicación.
Samsung se dio cuenta de la demanda del mercado y lanzaron el Galaxy Fit 3 el año pasado, lo que sorprendió a muchos, ya que el Galaxy Fit 2 había salido en 2020 y se asumía que la serie había sido descontinuada. Sin embargo, al notar la falta de un dispositivo inteligente a un precio accesible de solo $59 / £49 / AU$139, la compañía decidió revivir la categoría de rastreadores de actividad, ofreciendo una opción más económica a quienes no pueden costear un Samsung Galaxy Watch 8 o un Galaxy Ring.
A pesar de que la gama de Fitbit sigue vendiéndose bien, hay una oportunidad para que Google revitalice la marca. Un modelo como el Inspire 4 o Luxe 2 sería ideal: un rastreador de actividad al estilo 'piedra' que ofrezca diferentes opciones de correas y tal vez sea compatible con las bandas antiguas de Luxe o Inspire. Además, sería beneficioso incluir un sistema que permita desenganchar el dispositivo y colocarlo en el brazo o el pecho para mejorar la precisión de las mediciones de frecuencia cardíaca durante el ejercicio.
Dada la competencia que representa el Samsung Galaxy Fit 3 y el éxito continuo de rastreadores de actividad económicos, junto con la fortaleza de la marca Fitbit, parece haber un espacio perfecto para refrescar el mercado. El Inspire 3 ya tiene tres años y podría beneficiarse de una renovación. Es un buen momento para que Google reitere su compromiso con los seguidores de Fitbit.