
Las gafas de inteligencia artificial de Apple se acercan, aunque no como imaginas.
Se ha informado que Apple está intensificando el progreso en la creación de sus nuevas gafas inteligentes, las cuales estarán impulsadas por inteligencia artificial.
Apple está intensificando la creación de un nuevo dispositivo portátil: unas gafas inteligentes impulsadas por inteligencia artificial, que tienen como objetivo competir directamente con las Ray-Ban de Meta. Según fuentes, la compañía con sede en Cupertino se prepara para un lanzamiento a finales de 2026 y ha comenzado a trabajar en prototipos a gran escala para su producción.
Este desarrollo actualiza información anterior sobre la presentación de las gafas junto con chips personalizados inspirados en la arquitectura del Apple Watch. Inicialmente, se había mencionado que la producción de estos chips comenzaría en el verano de 2026, pero ahora se confirma un enfoque más ambicioso: Apple pretende iniciar la producción de cantidades significativas de las gafas, así como de sus componentes, para finales de 2025.
Aunque las gafas de realidad aumentada aún están lejos de su lanzamiento, este nuevo dispositivo, cuyo nombre en código es N401, está diseñado para ofrecer a Siri un contexto del mundo real en un diseño más ligero que los auriculares. Se puede conceptualizar como unas "Vision Light": unas gafas inteligentes equipadas con cámaras, altavoces y micrófonos, capaces de realizar traducción en tiempo real, manejo de llamadas y proporcionar indicaciones, todo sin incluir pantallas de realidad aumentada como las del Vision Pro. En cambio, estas gafas se centran en consultas de audio y voz, buscando simplificar la funcionalidad y reducir costos y volumen.
Esto aclara que Apple está explorando tanto un modelo de realidad aumentada como otro que no lo sea, siendo el N401 un claro exponente del segundo. Estos nuevos dispositivos forman parte de una estrategia más amplia de Apple para mantener su relevancia en un mercado de dispositivos habilitados para la inteligencia artificial que está en rápida expansión. Competidores como Meta y Google ya están presentes, y la reciente colaboración en hardware entre OpenAI y Jony Ive añade más presión al entorno.
Vale la pena destacar que el último informe no menciona los chips especializados previamente filtrados, como Glennie para AirPods y Nevis para Apple Watch, aunque reitera que Apple enfrenta desafíos en integrar datos de cámaras y sensores en un formato ligero. La idea de delegar parte del procesamiento al iPhone, un tema tratado anteriormente, sigue siendo pertinente a medida que la compañía busca equilibrar rendimiento y eficiencia energética.
En cuanto a otros experimentos en dispositivos portátiles, no todas las iniciativas han prosperado. Se ha informado que Apple ha abandonado el desarrollo de un reloj inteligente con cámara integrada y capacidades de análisis ambiental, un proyecto que enfrentó problemas técnicos y preocupaciones de privacidad. Internamente, el proyecto de gafas inteligentes enfrenta limitaciones similares en inteligencia artificial que han afectado otras áreas de la empresa. Mientras que las Ray-Ban de Meta utilizan Llama y las gafas Android XR se apoyan en Gemini de Google, Apple ha recurrido hasta ahora a soluciones de terceros, como OpenAI y Google Lens, para la comprensión visual en el iPhone.
Los analistas anticipan que Apple podría presentar sus propios modelos patentados en un futuro cercano, posiblemente junto a estas nuevas gafas inteligentes. Si todo sale como está planeado, este nuevo dispositivo representará el primer gran paso de Apple en el ámbito de la inteligencia artificial portátil, con la promesa de transformar nuestra interacción diaria. Aún queda por comprobar si logrará superar a Meta en este competitivo sector, pero Apple no parece dispuesta a quedarse atrás.