¡Besa mi anillo, Apple Watch! He cambiado a un anillo inteligente para el seguimiento de la salud y no tengo intención de regresar.

Adquirí un Apple Watch hace algunos años en una época más tranquila de mi vida. Necesitaba registrar mis caminatas de 10K, monitorear mi ritmo cardíaco y seguir mi sueño, así que opté por un Apple Watch SE 2 en lugar de un modelo más avanzado. Era justo lo que necesitaba, pero el seguimiento del sueño era lo más importante para mí, ya que no he sido una "buena" durmiente; para mí, cuatro horas de sueño representan una buena noche.

Sin embargo, llegué a esa etapa en la vida de una mujer que puede traer experiencias incómodas: la perimenopausia. Este tema puede resultar incómodo para algunos, pero para mí, las "experiencias incómodas" describen de manera superficial lo que he experimentado; mis síntomas han sido bastante severos, incluyendo patrones de sueño cada vez peores, múltiples sofocaciones al día, cambios de humor y niebla cerebral. Se ha convertido en una montaña rusa emocional.

Las funciones básicas del Apple Watch SE no me ayudaban a entender lo que estaba sucediendo en mi cuerpo, algo crucial para poder manejar mis síntomas diarios. Tenía dos opciones: gastar en un mejor smartwatch o en una banda Whoop (y su suscripción), o probar un anillo inteligente. Opté por la última opción y estoy satisfecha con ello.

Consideré probar el Oura Ring, que supuestamente tiene características para monitorear síntomas de perimenopausia, pero la suscripción necesaria para acceder a datos detallados me desanimó. Así que probé el Ultrahuman Ring Air, el cual no tiene barreras de pago y ofrece mucha información de manera gratuita.

Después de un mes de uso diario, aún estoy descubriendo todos los datos que este dispositivo proporciona. Es importante destacar que, aunque el Ultrahuman Ring Air no ofrece soluciones directas para mis síntomas, sí me brinda perspectivas sobre por qué algunas métricas no están en niveles óptimos, que puedo relacionar con mi menopausia o discutir con mi médico en la próxima cita.

El cambio al anillo inteligente también se debió a su forma; mis patrones de sueño son bastante pobres y soy una durmiente muy ligera, capaz de despertar con el clic de un interruptor. He dormido con el Apple Watch en la muñeca, pero siempre lo sentía, lo que afectaba mi descanso. En cambio, el anillo no me interfiere tanto; aunque es más grueso que otras joyas que uso, es ligero, lo que hace que el Ultrahuman Ring Air se convierta en una excelente opción por su comodidad.

El Apple Watch tiene una vida útil de batería limitada, con apenas 18 horas de duración. Como resultado, solía cargarlo durante la noche y rara vez monitoreaba mi sueño con él. El Ultrahuman, por otro lado, puede durar varios días sin necesidad de recarga, lo que permite un seguimiento constante. Además, prefiero que las notificaciones se envíen a mi teléfono de manera silenciosa, evitando distracciones en mi dedo. La ausencia de pantalla me impide observar obsesivamente mis métricas, lo que solía alimentar mi nivel de estrés.

Uno de los aspectos positivos del Ultrahuman Ring Air es que me informa sobre cuánto tiempo debo estar al aire libre para obtener suficiente vitamina D sin arriesgarme a quemaduras solares. Al configurarlo, me preguntaron sobre mi etnicidad para determinar mi color de piel, lo cual es relevante en este contexto. Todos los días, recibo notificaciones sobre el tiempo óptimo para estar expuesta al sol y a qué hora es mejor consumir cafeína.

A pesar de que sigo sin seguir al pie de la letra esos consejos debido a mi trabajo en una oficina, es útil saberlo, especialmente para mujeres de cierta edad, ya que la salud ósea se vuelve crítica. El Ultrahuman me proporciona un puntaje de sueño cada mañana, desglosando métricas como eficiencia del sueño, temperatura corporal y consistencia del sueño, algo que no obtengo del Apple Watch.

Aunque puede parecer mucha información, para mí es útil comprender las fluctuaciones en mi sueño, incluyendo los picos de temperatura corporal que a menudo coinciden con los episodios de sudores nocturnos. El Ultrahuman también me sugiere el mejor momento para comenzar a prepararme para dormir cada noche, lo cual, aunque no siempre puedo seguir, es información que reconozco a diario.

Deseaba recibir notificaciones en tiempo real sobre posibles picos de temperatura en mi piel, lo que me ayudaría a anticipar los sofocos, pero estos solo se muestran en la app después del hecho. Aunque el Apple Watch SE no tiene sensor de temperatura corporal, el anillo me ofrece datos más precisos, aunque un poco tardíos.

A pesar de que aún sigo explorando todas las características del Ultrahuman Ring Air, estoy agradecida por los conocimientos que ya he adquirido. Espero que la empresa implemente más funciones relacionadas con la salud femenina en el futuro. Hasta entonces, no tengo planes de regresar a usar un smartwatch; los anillos inteligentes se han convertido en mi preferencia. La forma, los datos detallados y las explicaciones de cada métrica son valiosos para mí.