He dedicado 20 horas a Bravely Default Flying Fairy HD Remaster en Nintendo Switch 2, y aunque no ha cambiado mucho, está bien así.
Valientemente el mismo
Bravely Default Flying Fairy HD Remaster se presenta como una oportunidad perfecta para que los jugadores vuelvan a sumergirse en este clásico RPG, ya que retiene la esencia de su lanzamiento original en Nintendo 3DS. Para quienes no lo conocen, es un título emblemático que captura la nostalgia de los RPGs de 16 bits, y su regreso es un testimonio de cómo a veces no es necesario cambiar algo que ya funciona bien. A pesar de que su estilo visual puede parecer algo anticuado, el juego sigue siendo atractivo.
Este remaster incluye el sistema de Brave y Default, que añade una tensión única a cada enfrentamiento. La trama es extensa y atrayente, lo que hace que cada combate y cada interacción se sienta fresco incluso después de tantos años. La historia comienza con Tiz, el único sobreviviente tras una catástrofe en su aldea. Junto a Agnes Oblige, una sacerdotisa de los cristales, y sus nuevos amigos Edea Lee y Ringabel, se embarca en una misión para restaurar el equilibrio del mundo.
La jugabilidad se basa en turnos y un profundo sistema de trabajos que permite a los jugadores personalizar sus personajes de maneras creativas. Estos trabajos, que abarcan desde magos hasta comerciantes, permiten a los jugadores heredar habilidades y combinar tácticas para maximizarlas en las batallas. Esto es crucial, ya que la estrategia se convierte en un componente esencial para vencer a los jefes.
A lo largo del juego, la gestión del BP (puntos de valentía) es fundamental, ya que los jugadores deben elegir entre atacar o defender para maximizar su potencial durante los combates. Aunque algunos jugadores pueden encontrar que el ritmo de combate es lento, las opciones de auto-batalla y ajustes en la frecuencia de encuentros ayudan a mitigar esta sensación.
A nivel visual, el remaster mantiene los modelos 3D de baja resolución del original, aunque con algunos ajustes en las texturas. Las áreas más destacadas aún conservan su atractivo visual, recordando a los jugadores la belleza del diseño artístico de la época. Sin embargo, el remaster ha realizado algunas adaptaciones para estar al día con las características del Nintendo Switch Online, pero esto no ha logrado captar la esencia original de la experiencia social del 3DS.
Se incluyen dos nuevos minijuegos que no aportan demasiado al conjunto, y aunque tienen un diseño divertido, no logran ofrecer una experiencia completamente satisfactoria. En general, este remaster es muy similar al juego de 3DS, y aunque algunos podrían desear más contenido nuevo, es innegable que mantiene la calidad de su predecesor.
Bravely Default Flying Fairy HD Remaster es un recordatorio de que los clásicos pueden seguir siendo relevantes y emocionantes. Este juego se presenta como un viaje nostálgico que, aunque no desafía las capacidades de la nueva consola, sigue siendo uno de los mejores RPGs de la última década y una excelente opción para aquellos que nunca lo han probado.
