
Cambié mis viejas bombillas por estas bombillas inteligentes de Lepro, y por solo 16 dólares mi oficina ahora luce impresionante.
¿Iluminación dinámica, control por voz y ambientes generados por inteligencia artificial por solo ocho dólares cada bombilla? ¡Vendido!
Las bombillas LED inteligentes Lepro B2 AI, vendidas en paquetes de dos, están disponibles en Amazon por $15.99 a partir del 15 de abril, lo que representa un descuento del 43% sobre su precio habitual de $27.99. Tras cambiar las viejas bombillas de mi lámpara de techo por las Lepro B2, he notado que la iluminación de mi habitación interactúa con la música de una manera sorprendente.
Por el precio de $15.99, obtienes un paquete de dos bombillas que normalmente cuestan $27.99, lo que equivale a $8 por bombilla, incluso menos de lo que pagué por mi última taza de café. Estas bombillas no son las típicas en el mercado; operan con el sistema LightGPM de Lepro, que utiliza inteligencia artificial entrenada en principios de diseño de iluminación y psicología del color. Aunque pueda sonar como un término de moda, se traduce en que puedes expresar cómo te sientes, ya sea que estés cansado o recibiendo visitas, y recibir hasta diez opciones de iluminación que se adapten a esa atmósfera. No es necesario profundizar, simplemente indicas lo que deseas y la bombilla se encarga del resto.
En cuanto a su brillo, ofrecen 1100 lumens, superando la intensidad de las bombillas incandescentes de 75W que solía usar. También permiten el control completo de colores RGB y tonos blancos ajustables que van desde 2700K a 6500K. Aprecio poder cambiar de una luz blanca brillante por la mañana a un resplandor cálido y suave por la noche, sin tener que jugar con múltiples configuraciones.
Las bombillas incluyen control por voz, siendo compatibles con Alexa y Google Assistant. A través de la aplicación de Lepro, puedes establecer horarios, controlar manualmente la iluminación, sincronizarla con música y utilizar configuraciones de ambiente. Tienen modos especiales como rutinas de despertarse y dormir, que ajustan gradualmente el brillo. Personalmente, programé la mía para atenuarse a las 11 p.m., lo que, al menos, me intenta convencer de ser más responsable.