Clientes de 23andMe informados sobre la quiebra y posibles reclamaciones — el plazo para presentar solicitudes es el 14 de julio.

23andMe, la reconocida empresa de pruebas genéticas que en su momento tuvo un valor de miles de millones, se encuentra actualmente en medio de un proceso de bancarrota bajo el Capítulo 11. Este proceso ha llevado a la compañía a informar a millones de clientes, tanto actuales como antiguos, sobre su elegibilidad para presentar reclamaciones en el marco de la reestructuración. La empresa, junto con 11 de sus filiales, incluidas Lemonaid Health y LPRXOne, solicitó protección por bancarrota el 23 de marzo de este año en el Distrito Este de Missouri.

A partir del pasado domingo, se notificó a los clientes que tienen plazo hasta el 14 de julio para presentar reclamaciones por las pérdidas sufridas. Este capítulo de bancarrota ocurre tras un periodo tumultuoso de 18 meses para 23andMe, que se caracterizó por una caída en las ventas, la salida de ejecutivos y un grave incidente de seguridad que comprometió la información personal sensible de casi 7 millones de usuarios. Este incidente fue revelado públicamente en octubre de 2023 y expuso datos como nombres, años de nacimiento, etiquetas de relación, porcentajes de ADN compartido con familiares, informes de ascendencia y ubicaciones autoinformadas.

La situación desencadenó múltiples demandas colectivas y generó una ola de desconfianza por parte de los consumidores, afectando severamente la parte de negocio dirigida al consumidor de la compañía. Los clientes que resultaron afectados por la filtración de datos, específicamente aquellos que recibieron notificaciones de que su información fue comprometida entre mayo y octubre de 2023, ahora pueden presentar lo que se conoce como una Reclamación por Incidente de Ciberseguridad. Aquellos que hayan sufrido daños financieros u otros como consecuencia de la brecha de datos podrán incluir su reclamación en el caso de bancarrota.

Además, los clientes que tengan quejas de otro tipo, no relacionadas con el ciberataque, como problemas con los resultados de pruebas de ADN o servicios de telemedicina, tienen la opción de presentar una reclamación por separado bajo la Paquete de Fecha Límite General. El Congreso también ha expresado preocupación por las implicaciones sobre la privacidad que conlleva este proceso de bancarrota.

La caída de 23andMe fue rápida y sus problemas se vieron agravados por su ambiciosa pero costosa expansión hacia la salud digital y la telemedicina, incluyendo la adquisición de Lemonaid Health por 400 millones de dólares en 2021. Aunque esta estrategia tenía como objetivo diversificar la oferta de la empresa más allá de las pruebas de ADN para consumidores, resultó en una carga financiera que no logró generar el crecimiento esperado. Además, un acuerdo propuesto de 30 millones de dólares relacionado con una demanda colectiva sobre el ciberataque permanece en suspenso debido a los procedimientos de bancarrota, y los abogados de 23andMe indican que el acuerdo está en disputa ahora que la empresa está en bancarrota. Los clientes que deseen preservar su derecho a compensación deben presentar una prueba formal de reclamación independientemente de su participación en la demanda colectiva.